TPM es la sigla en inglés de Trusted Platform Module (Módulo de Plataforma de Confianza), y se ha convertido en protagonista de la última novela relacionada con Windows 11. Se trata de un chip dedicado aislado del resto del equipo que almacena y gestiona diversos datos sensibles de un PC. El pequeño componente está presente en la placa base del PC y podemos encontrarlo en muchos equipos desde 2016 en adelante.
De hecho, fue Microsoft la compañía que "presionó" a los fabricantes para la incorporación de TPM 2.0 en sus equipos. De hecho, se impuso como condición para la certificación de hardware compatible con Windows 10. Sin embargo, recién ahora aparece como un hipotético impedimento para la instalación de Windows 11, por más que los demás requisitos se cumplan con holgura.
Entonces, ¿por qué Microsoft insiste en la obligatoriedad de TPM 2.0 para la instalación de Windows 11? Esto dijo la compañía, a través de David Weston, director de Seguridad Empresarial y de Sistema Operativo:
El propósito [de TPM] es ayudar a proteger las claves de cifrado, las credenciales de usuario y otros datos confidenciales detrás de una barrera de hardware para que el malware y los atacantes no puedan acceder o manipular esos datos.
Los ordenadores del futuro necesitan esta moderna root-of-trust (raíz de confianza) de hardware para ayudar a protegerse de amenazas tanto comunes como elaboradas, como el ransomware y ataques más sofisticados de los estados-nación. Requerir el TPM 2.0 eleva el estándar de seguridad del hardware al solicitar esa raíz de confianza incorporada.
TPM 2.0 es un componente fundamental para brindar seguridad junto a Windows Hello y BitLocker, que ayudan a los clientes a proteger mejor sus identidades y datos.
Fuente:https://hipertextual.com/2021/06/tpm-2-0-windows-11